El ministerio de Energía, que conduce Juan José Aranguren, le pidió a las industrias "realizar el máximo esfuerzo de reducción de sus consumos" ante este panorama.

En un comunicado, el ministerio detalló que "ante la reducción de la entrega de gas a la Argentina -de entre 8 y 11 millones de metros cúbicos diarios- por parte de Bolivia, se decidió solicitar a las industrias que realicen el máximo esfuerzo de reducción de sus consumos, con el objetivo de preservar el abastecimiento a los hogares, hospitales y escuelas".

Por ello, no se venderá GNC en las estaciones de servicio de todo el país entre las 18 y las 23 de este miércoles "hasta tanto se reponga la provisión normal de entrega de gas boliviano".

Al respecto de la medida, taxistas mostraron su malestar esta tarde, ya que los costos se incrementan al tener trabajar con nafta y corren por cuenta del bolsillo de los conductores. 

"Las GNC están en un 90% cerradas", le comentó a este medio Gabriel, un taxista oriundo de Quilmes que recorre principalmente los barrios Palermo, Villa Crespo y Colegiales. "No se puede trabajar así, Aranguren está aprendiendo sobre la marcha", cuestionó el chofer al ministro de Energía.

Sobre lo que representa utilizar nafta en lugar de gas, otro taxista, de nombre Facundo, le dijo a Diario Registrado que resulta "un 40 por ciento más caro". 

El Ministerio de Energía explicó que la caída en la provisión se debe "la situación de merma en el envío de gas responde a problemas en un yacimiento del vecino país y a la necesidad de priorizar el abastecimiento a la Republica Federativa de Brasil y al propio mercado interno de Bolivia, ajustando las entregas a la Argentina".