El Gobierno se encuentra trabajando para poder bajar el precio de la carne a través de un plan que impacta de forma negativa en los pequeños y medianos comercios.

El subsecretario de Comercio Exterior, Javier Tizado, aseguró que “el problema que hay en la Argentina de los altos precios es por la falta de competencia”, y por eso destacó “el plan ambicioso de mercados y ferias, con 60 pesos el kilo de asado”.

Sin embarco, un carnicero de barrio puede dar testimonio de que su negocio compra el kilo a 70 pesos, lo que demuestra la inviabilidad de la iniciativa que afectará a los pequeños comercios.