Los números oficiales muestran un aumento en las compras en dólares, así como también los ahorristas que eligen esta moneda para cuidar su capital. 

El contexto ayuda: la profunda crisis en la que se encuentra el país hace que el peso pierda terreno ante la moneda extranjera, aunque esto podría ser un arma de doble filo sobre todo para la clase media.

El contexto internacional no es para ignorar. La victoria de Trump en Estados Unidos, sin duda, fue un golpe duro al proyecto de Macri, quien a propósito se 'la había jugado' por Hillary. Y perdió.

Las políticas proteccionistas y el incremento de la tasa de la Reserva Federal serán un verdadero dolor de cabeza para la política de endeudamiento del macrismo.

Más aún, con un déficit fiscal en ascenso, economías cerradas y las dificultades para encontrar mercados en el exterior podrían hacer que el Gobierno haga uso de una de las medidas más polémicas de su gestión: la habilitación para tomar dólares de los bancos privados.

La aprobación de la Comunicación A6105 fue tomada por muchos como un "corralito encubierto", donde los depósitos en dólares podrían financiar al Tesoro Nacional.

Hoy, el sistema cuenta con US$ 27.100 millones en depósitos, de los cuales unos US$ 9.000 fueron prestados a privados, por lo que en base a los niveles de encaje actuales, el Tesoro Nacional se podría hacer con entre US$ 4.500 millones  y 3.500 millones de dólares de los ahorristas para financiarse mediante títulos de deuda pública.