Dietrich, como se sabe, es una concesionaria de autos nuevos y, como su nombre lo indica, pertenece a Guillermo Dietrich, padre –y socio– del ministro de Transporte de la Nación. Dietrich padre es también vicepresidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC).

Y como tal, como empresario y como dirigente gremial, no pudo eludir la realidad económica argentina durante una charla en Córdoba: se preparó un machete pero lo dejó de la lado para improvisar una furibunda crítica al modelo macrista.

"Menos impuestos por mayor recaudación. Menos por más... Cuando Argentina tenga los impuestos que en su plataforma nos prometió el gobierno actual, y tenga por ejemplo como Paraguay, que tiene tres impuestos, creo que podemos arrancar", dijo el empresario ante un entusiasmado auditorio de pares.

Y con relación a la suba del dólar y del riesgo país, fue lapidario: “Esto me hace acordar a la época del Rodrigazo”, por el ajuste que en 1975 impuso el entonces ministro de Economía Celestino Rodrigo.

Con aquel brutal ajuste, los ingresos de los asalariados se evaporaron, la inflación de ese año llegó hasta el 777 por ciento y hubo desabastecimiento de productos de primera necesidad: no se conseguían alimentos ni combustibles...