El Teqball se desarrolla sobre una mesa parecida a la del ping pong pero, para generar otra complicación a los participantes, la tabla está arqueada, para lograr que siempre vaya hacia el jugador que está del otro lado. Se puede tocar, como máximo, dos veces seguidas con la misma parte del cuerpo.

Debido a las dificultades que presenta el juego, varios equipos holandeses han decidido utilizar el deporte como parte de los entrenamientos para mejorar la técnica de control y manejo del balón. Si bien es un deporte con reglas, no cuenta con árbitros que las hagan cumplir ya que la mesa posee cuatro sensores para contabilizar los puntos a través de una aplicación.