El futbolista belga Gregory Mertens, de 24 años, murió el jueves tras haber sufrido el lunes un paro cardíaco en pleno partido.

La lamentable noticia fue anunciada por la federación belga y su club, el Lokeren de la primera división.

El diario local Het Laatste Nieuws informó que Mertens se desvaneció a los 25 minutos del encuentro amistoso entre su equipo y el Genk en la noche del lunes y tuvo que ser reanimado durante varios minutos en la cancha, antes de quedar internado en coma inducido en un hospital de Genk.

De acuerdo al parte de los médicos del club, a Mertens intentaron operarlo el martes, pero allí surgieron nuevas complicaciones. A lo largo de su carrera, el que fuera internacional en su etapa de juvenil había superado varios exámenes físicos, sin que se le detectaran inconvenientes cardíacos, según destacó el club.

El entrenador de la selección belga, Marc Wilmots, reaccionó con gran tristeza por la noticia. "La familia del fútbol belga está de luto. Mi más sentido pésame para su familia, sus amigos y sus compañeros de equipo", remarcó el ex futbolista del Schalke.