José Mourinho volvió a ser noticia. Su Chelsea ganó sobre la hora y clasificó a las semifinales de la Champions League. No sólo eso, sino que el DT, luego del gol agónico de Demba Ba, fue corriendo hasta el córner donde se encentraban sus jugadores para unirse a su festejo.

Pero su fin no fue "vender humo", como ocurre bastante seguido, sino aprovechó la situación para darle indicaciones tácticas a sus dirigidos.