"Los jugadores no le entendían nada", dijo Caruso sobre el árbitro brasileño Leandro Vuaden, y remató: "Ni las señas ni las explicaciones que daba, parecía que dirigía fútbol playa".

Caruso dejó sentada su postura acerca de la decisión de Conmebol, de designar a un juez extranjero por sobre los argentinos: "Los prefiero antes que a los extranjeros, porque conocen la idiosincrasia de nuestro fútbol".