La mascota del equipo Austria Viena protagonizó un episodio bochornoso, justo en el momento en el que ingresaba al campo de juego para comenzar con su show de animación.

Lejos de entretener al público, el hombre encargado de ocupar el disfraz de león “Súper Leo”, entró a la cancha completamente borracho. Su estado era tal, que no podía mantenerse en pie.

Sin estar portando la cabeza del traje, se presentó en evidente estado de ebriedad, y el personal de seguridad tuvo que intervenir para poder levantarlo del suelo y retirarlo del césped.

Como si fuera poco, la borracha mascota intentó escaparse de los empleados de seguridad, siendo finalmente retirado en un auto, luego de un triste episodio que será recordado por los hinchas.