A 24 días de aquel histórico partido, aún tenemos la sangre en el ojo. Un disparo certero al arco podría haber cambiado la historia para argentinos y alemanes. Millones de argentinos aún se lamentan el mano a mano que desperdició Gonzalo Higuaín ante Alemania.

Corrían 20 minutos del primer tiempo, cuando Toni Kroos se elevó en el aire en 3/4 de cancha y, errónemente, cabeceó hacia su arco. Disimulado y atento, allí se encontraba el 'Pipita' para adueñarse de esa pelota sin destino. Entonces, ahí fue cuando llegó el momento de la verdad. El exdelantero de River se enfrentó mano a mano al imponente Manuel Neuer.

Es cierto que la jugada fue inesperada y rápida, y que un zaguero llegaba para atorarlo desde atrás, pero en vez de aprovechar y sacarle todo el jugo a la situación, Higuaín se apuró y le pegó como venía. El descenlace de la jugada lo conocemos todos.

Este jueves, el propio futbolista habló por primera vez de aquella situación y, desde su punto de vista, comentó lo siguiente: "El gol errado puede suceder, porque los grandes delanteros pueden fallar", deslizó el centrodelantero del seleccionado nacional en una entrevista con el diario 'La Gazzetta dello Sport'.

Por otro lado, también analizó la actuación del equipo de Sabella en Brasil. Higuaín dijo sentirse "orgulloso" de todo lo que hicieron y explicó que realizaron "una gran final contra Alemania, construyendo más ocasiones que ellos". Y sí, sólo faltó meterla.

También reconoció que estaba "fuera de juego" en el gol que le anularon en aquella final, minutos después del gol que marró. "Es cierto, me decepcioné cuando el juez de línea levantó la bandera", manifestó al respecto.