La fractura de tibia y peroné que Agustín Orión le provocó a Carlos Bueno en el partido entre San Martín y Boca supera toda consideración sobre las circunstancias de un partido, la picardía o cualquier explicación que se intente como la que el propio arquero dio ayer casi como ubicándose en el lugar de la víctima que, a esa altura, ya estaba en un hospital.

Desde sus inicios en Midland, el '1' cuenta con momentos de intolerancia para con sus rivales, internas en planteles y hasta fue capaz de lesionar a su entonces compañero en Boca, Leandro Paredes en la disputa de una pelota durante un entrenamiento, a quien terminó causándole una rotura de ligamentos en el tobillo izquierdo, lo que lo dejó afuera de las canchas por tres meses.

Son recordados también sus encontronazos con Radamel Falcao García cuando el delantero jugaba en River y Orion en San Lorenzo. Entonces se cruzaron en distintos partidos luego de que el arquero acusara al hoy jugador del Manchester United de actuar con mala intención en una jugada. Poco tiempo después volvieron a cruzarse y el '1' le dijo: "La próxima te rompo la cabeza, ¿escuchaste?. La próxima te rompo todo, ¿escuchaste?. Te arruino. La próxima lo mando al hospital eh?. Te aviso, lo mando al hospital".

En la interna, Orión tuvo fuertes peleas con Jonathan Bottinelli en San Lorenzo y en Boca se recuerda el famoso conflicto con Pablo Ledesma que llegó incluso a los golpes de puño.En este campeonato, el jugador oriundo de Ramos Mejía sufrió su primera expulsión en Primera División. Fue hace poco tiempo atrás, cuando en el partido con Temperley por la segunda fecha le dio un cabezazo a Juan Ignacio Dinenno.

El enojo de la delegación de San Martín de San Juan fue contundente. El propio presidente del club, Jorge Miadosqui, lo acusó de malintencionado. Luego, en las declaraciones posteriores el jugador de Boca intentó desligarse de lo ocurrido: "Fue un golpe desafortunado para ambos, esperemos que no sea nada y que tenga una pronta recuperación", lanzó.