El gran objetivo de River es, en lo inmediato ganar el campeonato, y en el año obtener nuevamente la Copa Libertadores. Para ello, el gran objetivo de la dirigencia es retener a las figuras del equipo, en especial a Lucas Alario.

Para ello, diseñaron una estrategia de seducción, se lo ofrecieron a él y a su representante, y lo aprobaron en Comisión Directiva. ¿De qué se trata? Recibirá un aumento cada vez que finalice un mercado de pases y decida quedarse en River, hasta junio de 2018, fecha del vencimiento de su contrato. 

Es decir, debería rechazar todas las ofertas que le lleguen y jugar dos semestres más en Núñez para cobrar todo el plus económico que le ofreció la dirigencia.

Alario está la mira de los grandes clubes de Europa y es una fija que vendrán por él en las próximas semanas. Su cláusula de rescisión es de 18.000.000 de dólares, cifra que tendrán que pagar si lo quieren ya que D'Onofrio y compañía no lo largarán por menos.

Además, el delantero deberá devolver el monto a través del 15% que le corresponde de una transferencia en caso de marcharse antes de junio de 2018.

El plan de River es comprarle el 40% del restante pase de Alario a Colón en US$ 1.800.000, para pasar a tener el 100% y llevarse toda la torta en una futura venta.