River es uno de los clubes que más socios tiene en el mundo, la cifra en el padrón llega casi hasta cien mil y en su estadio solo entran 65 mil. La dirigencia quiere ampliar la capacidad del estadio y para eso peinsa en una ingeniería económica que le permita financiar la remodelación. La idea sería que peudan entrar 80 mil espectadores y l aplata la pondría Fly Emirates, que a cambio, pediría cambiar el nombre de la cancha.
Cambiar los nombres de los estadios ya se hizo costumbre en Europa, el Emirates Stadium del Arsenal, el Etihad del Manchester City y el Allianz Arena de Bayern Munich, que además recientemente compró el viejo Parque Antactica, el estadio del Palmeiras, son algunos de los que cedieron el nombre original a las empresas que desembolsan mucho dinero. River parece fue seducido a seguir ese camino y los socios tendrán la última palabra.
El proyecto para ampliar la capacidad consiste en suprimir la pista de atletismo que no tiene uso ni las medidas reglamentarias y acercar las tribunas al césped. La aspiración es construir una estructura con dos pisos de palcos y techar la cancha. También, está estipulado el levantamiento de una playa de estacionamiento de cuatro plantas y un restorán con vista al verde césped, como ostenta el Santiago Bernabéu. La propuesta es ambiciosa, está claro.
Eso sí, más allá de que Fly Emirates sobrevuela la zona de Núñez, el cambio de nombre en el estadio no depende solo de los dirigentes sino que el proyecto deberá ser aprobarlo por los socios.

River es uno de los clubes que más socios tiene en el mundo, la cifra en el padrón llega casi hasta cien mil y en su estadio solo entran 65 mil. La dirigencia quiere ampliar la capacidad del estadio y para eso piensa en una ingeniería económica que le permita financiar la remodelación. La idea sería que puedan entrar 80 mil espectadores y la plata la pondría Fly Emirates, que a cambio, pediría cambiar el nombre de la cancha.

Cambiar los nombres de los estadios ya se hizo costumbre en Europa, el Emirates Stadium del Arsenal, el Etihad del Manchester City y el Allianz Arena de Bayern Munich, que además recientemente compró el viejo Parque Antartica, el estadio del Palmeiras, son algunos de los que cedieron el nombre original a las empresas que desembolsan mucho dinero. River parece fue seducido a seguir ese camino y los socios tendrán la última palabra.

El proyecto para ampliar la capacidad consiste en suprimir la pista de atletismo que no tiene uso ni las medidas reglamentarias y acercar las tribunas al césped. La aspiración es construir una estructura con dos pisos de palcos y techar la cancha. También, está estipulado el levantamiento de una playa de estacionamiento de cuatro plantas y un restorán con vista al verde césped, como ostenta el Santiago Bernabéu. La propuesta es ambiciosa, está claro.

Eso sí, más allá de que Fly Emirates sobrevuela la zona de Núñez, el cambio de nombre en el estadio no depende solo de los dirigentes sino que el proyecto deberá ser aprobarlo por los socios.