Además de la polémica dentro del campo de juego por los cuestionados fallos del árbitro Fernando Rapallini, el clásico de Avellaneda terminó con destrozos en la cabina que le habían otorgado a los dirigentes de Racing.

Fue la propia cuenta de Independiente (@Independiente) la que se encargó de subir a las redes sociales las imágenes de como había había quedado el palco que le otorgaron a los directivos de Racing.

Vidrios rotos y un importante agujero en la pared (son de durlock, un material mucho menos resistente que una pared de ladrillos), y habría cedido durante los festejos de los hinchas del 'Rojo' durante la victoria ante Racing.