El Real Madrid hizo un gol detrás de otro porque tenía que hacerlo. Tenía que cumplir con su tarea doméstica de cada domingo. La temporada la cerró con una goleada, triste al fin y al cabo. Ni metiendo siete goles tuvo motivos para sonreír en una noche que será de despedida para algunos.

El partido era intranscendente para casi todos, menos para Cristiano. El portugués no desaprovecha las ocasiones y se anotó con tres goles más que relucen su cuarta Bota de Oro. Terminó con 48 goles en 28 partidos, que no le sirvieron para salir campeón.

En el segundo tiempo Ronaldo se fue del campo y el noruego Odegaard debutó con 16 años. Se convirtió en el jugador más joven en jugar con la camiseta del Real Madrid. Fue lo más especial de un partido que no definía nada y donde también anotaron "Chicharito", James, Jesé y Marcelo para los "Blancos", mientras que Diego Castro, Escudero y Lacen lo hicieron para el Getafe.