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Rosario Central sufrió este domingo una dura derrota a manos de Racing. Por la fecha 24 de la Superliga de primera división, la escuadra canalla perdió por 2 a 0 con la otra Academia en el Gigante y prácticamente dilapidó sus chances de clasificar a una competencia internacional.

Los goles del éxito racinguista fueron obras de Brian Mansilla a los 18 minutos del segundo tiempo y Lautaro Martínez a los 30', ambos producto de sendos contragolpes.

Quien vivió una tarde llena de emociones fue Eduardo Coudet, quien pisó por primera vez el estadio de Arroyito tras su salida de la institución. Al Chacho, los dirigentes le dieron una plaqueta en el medio del campo antes del pitazo inicial, lo saludaron todos los jugadores centralistas y el público le brindó una ovación inolvidable.

Con esta caída, Central quedó virtualmente afuera de la próxima Sudamericana: está a cuatro de River, el último en entrar (con un partido menos), con apenas 9 puntos en juego y varios equipos arriba.

Fue la primera vez que el Canalla suma dos derrotas en fila. Y dato preocupante: de los últimos cinco partidos, sólo en uno el equipo pudo convertir (ante Belgrano). En los demás, no pudo quebrar el cero.

El por qué

Fue un encuentro parejo, que Racing definió merced a dos contras fulminantes: la primera, tras una pelota parada en el área visitante que Tobio cabeceó hacia atrás, Solari envió para Mansilla y éste convirtió en un golazo; la segunda, tras una recuperación de Martínez sobre González y una definición certera.

Hasta ahí, se habían repartido el dominio sin grandes aproximaciones sobre el arco de Javier García. El conjunto de Fernández apostó a alguna pelota detenida ejecutada por Gil. Pero nunca exhibió razones en el campo para creer que podría ganarlo jugando bien.

En el primer acto, se contaron como ocasiones un disparo al arco de Camacho que contuvo el golero adversario a los 10'; y un tiro libre de Gil que pasó entre la barrera y se fue cerca del palo izquierdo; Racing se acercó por Triverio, a los 41', que definió cruzado y ancho.

En el complemento, la entrada de Nery Domínguez equilibró al equipo del Chacho y la de Lautaro Martínez potenció a Centurión y Mansilla, que cuando se enchufaron, liquidaron las acciones.

Los del Chacho ya habían tenido una jugada similar a las del primer gol: a los 8 minutos del complemento, una réplica de Solari y Mansilla casi acaba en el primer grito de la tarde.

Tras los goles, los auriazules no encontraron las ideas para poder achicar distancias. Y, como en toda la tarde, se fueron diluyendo cada vez que se acercaron al área oponente. Un rendimiento tan preocupante como determinante para sus sueños coperos.

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