La resolución impuesta por el juez de la causa Marcelo Romero, es que el jugador regrese a la Argentina y no salga del hasta declarar en la causa Nº 39247/10 por "lesiones graves y amenazas" que fue  imputado.

El hecho que implica al jugador de la selección nacional ocurrió el 7 de noviembre del 2010 en una vivienda de la localidad platense de Hernández, donde según la acusación, Rojo le habría partido una botella en la cabeza a Juan Pablo Gómez y también habría herido a Juan Pedro Céliz, cuando este ayudo a su compañero.