El atleta argentino Germán Chiaraviglio necesitó dos saltos para pasar los 5.50 metros, la marca con que se inició la prueba, pero fracasó en los tres intentos que hizo en los 5.65, registro que, a ese momento, ya habían alcanzado cinco de los atletas que competían, quedando así eliminado de la prueba.

La actuación del santafesino de todos modos entró en la historia, al entrar -el sábado pasado, con 5.70 metros- en esta definición entre los mejores 12 de los Juegos.

El argentino hizo un primer intento nulo, pero luego la competencia fue reprogramada por las malas condiciones climáticas y Chiaraviglio -con casi dos horas de retraso-, volvió a tener tres intentos en la marca inicial establecida.

Luego, en su segundo salto por los 5.65, se le cruzó un asistente en la carrera y, además, la varilla estaba mal colocada, con lo que el santafesino reclamó ante los jueces y le permitieron repetir el intento. Pero no hubo caso: volvió a fallar en ese y en el siguiente turno y se despidió de Río 2016.