Apenas consumada la resonante victoria de Sarmiento ante Boca 1-0 en Junín, los jugadores se trenzaron a empujones y golpes y todo terminó en escándalo. Todo comenzó con manotazos entre Nahuel Gallardo y Lucas Blondel. Hasta allí no había pasado de careos y empujones, hasta que llegó a la ronda Darío Benedetto, quien minutos antes había marrado el penal que le hubiera dado a Boca el empate- y le pegó una piña al hijo del Muñeco. 

Gallardo contó de manera picante su versión de los hechos: ”Fui a saludar a Lucas Blondel, de buena manera por el buen partido, y me niega el saludo. Quise decir algo, cosas que quedan adentro de la cancha, de por qué me negaba el saludo y ahí vino Benedetto, se metió en el medio medio a hacer quilombo. No se por qué, supongo que se quedó caliente del penal... Y tira una piña, empieza a repartir piñas”. 

En declaraciones a ESPN, prendió fuego al Pipa: “Me dijo Trucco que parece que mismo los de Boca le dijeron que lo eche a Benedetto, que hizo todo el quilombo él. Será medio un estorbo en el plantel". Y agregó: “Habrá que preguntarle a él, se ve que por el tema del penal, de las declaraciones en la semana en contra de él (tuvo un nuevo cruce con Agustín Almendra). Se ve que viene arrastrando un par de cosas y se la agarró conmigo”.