La marea de hinchas de Boca que llegó a Río de Janeiro se vuelve con las manos vacías tras el silbatazo del árbitro colombiano Roldán que sentenció la caída de Boca en el Maracaná, frustrando su sueño de ganar la añorada Séptima.

Una vez más -como en las últimas tres veces que llegó a la misma instancia- Boca se queda con el sabor amargo en la final, y nuevamente como en el 2018 en Madrid ante River, cayó en el alargue.

Esta vez fue 2 a 1, cuando Germán Cano abrió el marcador para el tricolor carioca y Advíncula empató con un zurdazo desde afuera del área.

Pero John Kennedy con un bombazo tras un cesión de cabeza de Keno puso las cifras definitivas.