Lo reconoció el presidente Daniel Angelici, como hace semanas lo hizo D'Onofrio en River: Boca recibió una oferta que oscila los 5 y 10 millones de dólares por año de una empresa de origen chino para cambiarle el nombre a la cancha, en un contrato que duraría diez temporadas. 

Bajo la presidencia del hombre macrista, la Bombonera, mítico e histórico templo xeneize, intentó ser mudada, tirada abajo, remodelada. Quienes se opusieron a todas esas modificaciones del símbolo por excelencia que distingue a Boca, considera que este último intento de cambiarle el nombre es el colmo. 

Y advierten que el tema deberá ser tratado en la Asamblea de Representantes, ya que el mandato de Angelici termina antes de que se pudiera firmar el acuerdo con la empresa asiática. 

En Europa sí

La gestión Angelici argumenta que, en Europa, es un recurso muy utilizado para sumar dinero. Por caso, en Alemania 14 de los 18 estadios de Primera División vendieron su nombre. 

Y en la Premier, Arsenal recibe de Emirates Airlines casi 34 millones de dólares. El contrato, firmado en 2006 es por 15 años.