El 14 de enero de 1946 Salvador Dalí, que ya había estado experimentando con el cine al colaborar con Luis Buñuel ("El perro andaluz", estrenado en 1929) firmó un contrato de dos meses de colaboración con la compañía Walt Disney.

El artista español acudió regularmente a los estudios de Disney en California para diseñar la parte estética de un cortometraje animado y trabajó en su guión junto con  John Hench. Fue titulado "Destino" con música de la canción homónima deArmando Domínguez.

En la historia se narra el romance entre una bailarina y el dios Cronos con la particular "magia surrealista" que Dalí solía darle a sus pinturas y sin perder la estética onírica. 

Sobre "Destino" Dalí había señalado que se trataba de una "mágica exposición de los problemas de la vida en el laberinto del tiempo"; aunque nunca llegó a ver finalizada la obra.

Recién en el 2003 se terminó el proyecto y recibió numerosos premios después de estrenarse, ese mismo año, en el Festival Internacional de Cine de Animación de Annecy, Francia. Medio siglo después comenzó a ganar mayor popularidad, por fuera del circuito de festivales, y a convertirse otra vez en "noticia".