En '1984', de George Orwell, el Gran Hermano controla la vida cotidiana de la población a través de las "telepantallas", ubicadas en todos los ambientes de todas los hogares; se trata de televisores para ver programas pero que, sobre todo, ven y vigilan al televidente esté donde esté.

Algo parecido pasa ahora con los nuevos smart TV. Así lo reconoció la empresa Samsung: cuando uno enciende el televisor, se ve en la necesidad de aceptar las condiciones de uso –que generalmente no se leen–, uno de cuyos puntos dice:

Por favor, tenga en cuenta que si sus palabras habladas incluyen información personal o confidencial, esa información estará entre los datos captados y enviados a terceros a través del uso de reconocimiento de voz.

En efecto, los smart TV que tienen reconocimiento de voz recopilan datos de los usuarios con el objetivo de "mejorar el rendimiento" de los productos, incluso con el aparato está apagado; según la empresa, esa información puede ser enviada a terceros con fines comerciales o...

Aunque Samsung informó que el reconocimiento de voz se puede desactivar, ello no significa que en realidad se desactive... Y causa más preocupación que no sea esta la única marca que capta información: en 2013, un usuario de LG denunció sufrir esa situación.