El portal Apertura.com publicó que "El zoológico porteño cerrará sus puertas a partir de febrero, tras las reiteradas denuncias de trabajadores que alertaron por el mal estado de los animales y los problemas edilicios".

Legisladores porteños realizaron una presentación ante el Ejecutivo para intervenir las 18 hectáreas y de esa forma “preservar la seguridad laboral de los empleados, el patrimonio arquitectónico y los animales (…)”, entre otras cosas.

El proceso de reubicación de los 2500 ejemplares, de 350 especies distintas, será lento ya que deben primero adaptarse a sus nuevos hogares. Además falta determinar qué ocurrirá con el personal y cuidadores especializados.

Tampoco se conoce qué harán con el predio que cuenta con edificios de un alto valor histórico.