Parece que las voces opositoras del periodismo argentino continúan sedientas de despidos, a pesar de los miles y miles de trabajadores que han quedado en la calle desde que el Gobierno emprendió la tarea de vaciar el Estado.

Esta vez fue Ari Paluch quien se metió en el tema, y dialogando con la vicepresidenta Gabriela Michetti sobre las cesantías en el Senado, le preguntó si a los trabajadores que recuperaron sus puestos se los tuvo “que fumar”.