Cristina Fernández de Kirchner llegó a Comodoro Py y no pudo creer lo que vio. Miles de policías la esperaban como si fuera una peligrosa criminal de guerra, en una causa en la que declaró como testigo.

Las cámaras del programa de Alejandro Fantino captaron el momento en que Cristina se baja del vehículo y filma con su celular el absurdo dispositivo de seguridad que se movilizó en torno a ella, con plata -obviamente- de los contribuyentes.

Hasta la mesa de Animales Sueltos estuvo de acuerdo en que tanta cantidad de efectivos fue una provocación y un acto completamente sin sentido.