“Cuando digo cárcel o bala no estoy pidiendo genocidio, estoy diciendo apliquemos la ley. Cárcel o bala es, si te corta la empresa, o lo apresás o si se resiste es bala. Ponele la bala que quieras, pero no es puerta giratoria”, dijo José Luis Espert.

Ahora que gobiernan los libertarios, el economista de la ultra derecha no encuentra límites a la hora de pedir públicamente que le disparen a los trabajadores que quieran defender sus derechos laborales contra empresas que despiden o no pagan los sueldos.

En medio de un polémico accionar, Espert asumió el poder de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de Diputados. La izquierda y diputados de Unión por la Patria cuestionaron su designación por la agresividad que maneja habitualmente.

Pero son otros los tiempos y en este país hay margen para que dirigentes con cargos amenacen de muerte a los trabajadores que resisten el ajuste. Es un verano triste para la Argentina.