Mikhail Gorbachov, que fue el último jefe de Estado de la Unión Soviética de 1988 a 1991, escribió una columna para la revista Time en la que mostró su preocupación por la escalada armamentista donde el peligro nuclear sigue ganando terreno. 

"El mundo está colmado de problemas. Los responsables políticos parecen confundidos y perdidos. Pero ningún problema es más urgente hoy que la militarización de la política y la nueva carrera armamentista", señaló Gorbachov. 

Y agregó: "La situación actual es demasiado peligrosa. Más tropas, tanques y personal armado están siendo traídos a Europa. Mientras los presupuestos estatales están luchando para financiar las necesidades sociales esenciales de la gente, los gastos militares están creciendo".

El Premio Nobel de la Paz en 1990 planteó que "los líderes políticos y militares suenan cada vez más beligerantes y las doctrinas de defensa más peligrosas. Los comentaristas y personalidades de la televisión se están sumando a este coro belicoso. Todo hace parecer como si el mundo se estuviera preparando para una guerra". 

Además mostró su verdadera preocupación ante una guerra nuclear e instó a que tenga lugar una reunión del Consejo de Seguridad entre los Jefes de Estado para establecer "que una guerra nuclear es inaceptable y nunca debería realizarse".

"Creo que la iniciativa para llevar a cabo esta resolución debería venir de Donald Trump y Vladimir Putin , los presidentes de dos naciones que tienen el 90% del arsenal nuclear del mundo y por eso cargan una especial responsabilidad", subrayó Gorbachov. Y advirtió: "El momento para decidir y actuar es ahora".

El señalamiento de Gorbachov forma parte de un movimiento internacional de especialistas que cada vez ponen mayor foco en la posibilidad de una verdadera catástrofe cuando la política se torna cada vez más violenta.