Este martes por la mañana, el tren con los restos de las víctimas mortales del siniestro del MH17 llegó a la ciudad ucraniana de Járkov, informó la agencia Interfax.

Algunas horas más tarde, el presidente ruso, Vladímir Putin, mantuvo una conversación telefónica con el primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, en la que se planificó la aplicación práctica de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para llevar a cabo una investigación internacional amplia, exhaustiva e independiente, en relación a la caída del avión de Malasyia Airlines.

Los cadáveres serán transportados a Holanda, donde se completará el proceso de identificación, según un comunicado de Interpol, una tarea para la que se ofrecieron a colaborar 13 países.

Interpol requirió a los países con nacionales fallecidos en la tragedia del MH17, el aporte de información relativa a las posibles víctimas para agilizar el proceso y que los cuerpos puedan ser entregados cuanto antes a sus familias.

En las primeras horas de este martes, un grupo de expertos de Malasia intentó acceder al lugar de la catástrofe, pero tuvo que regresar a Donetsk debido al fuego de las Fuerzas Aéreas de Ucrania, dijo un representante de las autodefensas que acompañó al grupo durante el trayecto.

Según sus datos, los aviones bombardearon una carretera en las afueras de la ciudad y provocaron el incendio de un coche.

Sin embargo, aseguraron que el grupo de expertos malasios continuarán en su intento de acceder al lugar de la catástrofe.