Los rebeldes pro rusos entregaron a responsables malasios las dos cajas negras del avión de línea derribado el jueves pasado en la zona que controlan en el este de Ucrania, además de los restos de las 298 víctimas fatales del ataque.

Al mismo tiempo, anunciaron a la prensa un alto al fuego en un radio de 10 km en torno al lugar donde cayó el aparato de Malaysia Airlines para facilitar la investigación de las causas del derribo, provocado según Estados Unidos por un misil lanzado desde la zona rebelde.

"Hemos decidido poner las cajas negras en manos de los expertos malasios", declaró el "primer ministro" de la autoproclamada República Popular de Donetsk (DNR), Alexandre Baradai, ante unos 150 periodistas presentes.

También este lunes, el Consejo de Seguridad de la ONU resolvió lanzar una investigación de los hechos en la cual otorgó un "papel central" en la investigación a la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI).

Los responsables separatistas les mostraron dos objetos de color rojo anaranjado que parecían grabadoras de vuelo.

"En nombre del Gobierno malasio, agradezco al gobierno de la República de Donetsk que nos entregue las dos cajas negras que son propiedad de Malasia", manifestó un miembro de la delegación de Malasia al tiempo que confirmó la integridad de los elementos probatorios: "Veo que las cajas negras están intactas y sólo tienen alteraciones menores".

"Vamos a ordenar un alto el fuego en un perímetro de 10 km alrededor" del lugar de la tragedia que ha dejado 298 muertos, señaló Borodai.

Los responsables malasios deben acompañar el tren refrigerado que transporta los cuerpos de los pasajeros del Boeing 777 hasta Jarkiv, en zona controlada por el Gobierno ucraniano, y que por estas horas aún permanece en Donetsk.

Los expertos de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) han llegado a Ucrania en respuesta a una solicitud del gobierno de Kiev, con el objetivo de ayudar a identificar las causas de la tragedia.