Además de descansar y disfrutar de su familia, los Obama lentamente vuelven a la vida pública pero de una manera mucho más descontracturada y ya fuera de los protocolos de la Casa Blanca. 

Michelle - que se transformó en un verdadero ícono de estilo como Primera Dama- sigue brindando lecciones de moda pero mucho más casual y sin tantos detalles. Por otro lado, el expresidente elige llevar traje pero sin corbata ni gemelos; además de usar unos cómodos anteojos de sol. 

La pareja, que también está escribiendo sus memorias, se muestra mucho más simple pero sin perder la elegancia. Y muchos esperan que en breve Michelle muestre sus rizos naturales, tal y como aparecieron durante sus vacaciones