"No me enojo cuando salgo, me enojo conmigo cuando no convierto. Nunca me voy a enojar porque el técnico decida que ingrese un compañero por mí, lo que sucedió fue que no me salieron bien las cosas en el partido y eso me dio bronca", explicó el ex Colón de Santa Fe, quien abandonó el campo de juego con gestos de fastidio e insultos al llegar al banco de suplentes.

"Se ganó un partido importante que era necesario porque veníamos bien y había que confirmarlo en una cancha difícil. El rival tenía un entusiasmo grande, más por enfrentar a River, pero nosotros no nos desesperamos y por suerte pudimos convertir", fue el análisis que hizo este lunes, al regresar de Córdoba, el futbolista de la selección argentina.

"Creo que recién con las expulsiones de Talleres (Pablo Guiñazú y Fernando Godoy), sentimos que podíamos ganar el partido, porque tenemos jugadores que saben tener la pelota y jugar con espacios como Andrés (D´Alessandro) o Leo (Ponzio), hay que seguir por este camino", agregó Alario.

El plantel riverplatense arribó al mediodía al Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery y tendrá jornada de descanso para regresar a los entrenamientos mañana por la mañana en el predio de Ezeiza, de cara al partido de la tercera fecha ante San Martín de San Juan el domingo próximo en el Monumental.