A pocos kilómetros de Río de Janeiro se halla la Costa Verde, un verdadero paraíso natural, en el que se popularizó ser "comido" por un río. 

En el antiguo pueblo de pescadores de Trindade, conocido por sus hermosas playas, se encuentra una atracción natural que, si bien no es una novedad para los locales, gracias a las redes sociales se puso de moda.

Se trata de la Pedra que Engola, algo así como ‘la piedra que en engulle’. Aunque es el cauce del río el que te succiona y te lleva a una cavidad rocosa para luego emerger del otro lado. 

Los que lo han experimentado dicen que es emocionante y aterrador al principio, cuando no sabés con qué te vas a encontrar del otro lado. La caminata de regreso a la cima de la cascada es de 20 minutos