La escena transcurre en un garaje. Un poco mareado, el Santa Claus del video primero hizo pis detrás de un auto, luego se tropezó y se pegó un golpe bárbaro, y como si fuera poco, una vez más se puso a orinar hasta que lo descubrieron.

Logró salir del estacionamiento, y una vez en la calle, se cayó al piso y no logró levantarse durante un buen rato. La gente que pasaba por el lugar aprovechó para filmarlo, y no podía creer el estado de ebriedad de este Papá Noel que no podía mantenerse en pie.