El vídeo se volvió viral no solo por lo llamativo de la situación; tres osos enormes y rudos junto a un globo rosa sino por cómo se comportan los animales totalmente sorprendidos con la extraña "visita". 

Claramente el globo habrá terminado bajo las enormes garras de alguno de ellos que tal vez apretó demasiado a su "nuevo amigo".