Sucedió en una localidad mexicana, donde una joven no tuvo mejor idea que subirse a la camioneta de la Policía Estatal para bailar el famoso twerking ante la mirada de los sorprendidos transeúntes, quienes se encargaron de filmar la situación con las cámaras de sus celulares.

Los efectivos le pidieron que se bajara y ante la negativa de la joven terminaron arrestándola.