Sudán no es para cualquiera. Si los árbitros argentinos se quejan de la presión, andá a dirigir allá y contame. 

Los hinchas de este equipo de la Copa de Sudán no se quedaron muy conformes con el árbitro. Entonces, pensaron: '¿Y si lo corremos para molerlo a palos?'. 

Por suerte, hasta donde se ve, no lo agarraron.