Obviamente, las bombas atómicas lanzadas por los norteamericanos sobre Iroshima y Nagasaki, las primeras –y hasta ahora únicas–sobre poblaciones civiles, que dejaron centenares de miles de muertos, se destacan en este trágico mapa dinámico de la segunda mitad del siglo XX.

Las décadas del 50 y del 60 fueron, sin duda, las de mayor cantidad de pruebas realizadas por los bloques apuestos, Estados Unidos y lo hoy disuelta Unión Soviética, cuando la guerra fría estaba en su apogeo.

Gran Bretaña y Francia, aliados del bloque estadounidense contra los soviéticos, también realizaron sus primeras pruebas durante el mismo período.

No obstante, en los 70 y 80 no se redujeron las pruebas sino que se aceleraron, ya con China, la India y Pakistán incluidos entre las naciones con arsenal nuclear.

Vale advertir que casi todos los continentes y subcontinentes sufrieron este tipo de pruebas; con excepción de uno: América Latina. Ciertamente, algo de los cual enorgullecernos.