Para mostrar la crudeza de las temperaturas que azotan a los Estados Unidos en los últimos días, este joven humedeció una remera tipo musculosa a la intemperie y la brisa la congeló en pocos segundos.

La prenda quedó como un pedazo de hielo cuando el termómetro marcaba la temperatura récord en los últimos 118 años en Central Park: 15.5 grados bajo cero.