Harry Atley, de 19 años, y Thomas Bloomfield, de 18, robaron un autobús por diversión luego de una noche de borrachera y lo manejaron a lo largo de 14 kilómetros por una ruta de la localidad inglesa de Tetbury hasta que perdieron el control y volcaron.

“Nos estamos robando un puto autobús”, se los escucha decir a los adolescentes una vez que lograron poner en marcha el vehículo. Después de turnarse para manejar en un lapso de 15 minutos, en donde en ningún momento disminuyeron la velocidad, uno de ellos perdió el control y el vehículo terminó volcando a un costado de la ruta.  Una cámara ubicada en el interior logró registrar toda la escena.

Finalmente, los jóvenes fueron detenidos y sentenciados a ocho meses de prisión o a pagar una fianza de 10.000 libras -13.000 dólares aprox.- por los daños ocasionados.

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