Es el órgano más grande del mundo. Desde 2006 se le concedió el primero de los Premios Europeos para Espacios Públicos Urbanos. Bajo los escalones, se encuentra oculto un sistema de tubos de polietileno y una cavidad resonante, que transforma este sitio en un gran instrumento de viento.

En la misma piedra del paseo fueron talladas las válvulas por las que entra y sale el agua, cuyo movimiento empuja el aire que es expulsado por 35 tubos dispuestos a lo largo de la costa.

El sonido dependerá de la velocidad y el empuje de las olas, por lo que las notas y piezas musicales dependerán única y exclusivamente de la fuerza del mar.

Además, la obra incluye un círculo de baldosas transparentes y lumínicas, con un sistema que reproduce el movimiento de la marea, con un increíble resultado visual.