Son miles los trabajadores rurales y vecinos del pueblo Kairuppala, en la India: cada año celebran la Guerra Pidakala como un ritual que ruega por los buenos resultados de la cosecha.

A partir de considerar a la vaca como un animal sagrado, su celebración cultural de arrojarse excrementos llama la atención en el mundo occidental: según reprodujo rt.com, se trata de una representación simbólica de la batalla entre los dioses Bhadrakali y Veerabhadra Swamy.