La ilusión de sentirse comunicados y acompañados es tan falsa que ni siquiera nos miramos a los ojos.

¿Cuál es la herramienta y quién la controla? ¿La computadora somete a las personas, o la mente humana es dominadora?

"Un mundo de interés propio, de imagen propia, de promoción propia", define el cortometraje que se pregunta por el futuro de la humanidad.