Como demuestra este experimento de la organización sueca STHLM Panda la gran mayoría de las personas no intervendrían al presenciar un hecho de clara violencia de género.

Mas allá de la problemática que este tema representa en nuestro país, donde según cifras de la Fundación Casa del Encuentro hay un femicidio cada 30 horas, a nivel global la problemática no es menor. Por miedo o indiferencia la gran mayoría de las personas no intervinieron de ningún modo para intentar evitar el abuso.

En la ciudad noruega de Oslo pusieron una cámara oculta en un ascensor y dos pares de actores simularon una pelea: 53 personas fueron sometidas al experimento y sólo una intervino.