Las mantis fantasma son unos insectos fascinantes e inofensivos, importantísimos para regular la diversidad de insectos y plagas en los jardines: mariposas, polillas, grillos, saltamontes y moscas están entre su más jugoso menú.

La costumbre de las hembras de comerse al macho a veces antes, durante o después del apareamiento se explica porque la hembra consigue un suplemento proteico beneficioso para la puesta de huevos, pero también es para facilitar los movimientos copulatorios: cuando devora la cabeza de su pareja, el macho se convierte en una máquina sexual e intentará copular todo lo que se le cruce por delante.