Hace rato que a Viviana Canosa se la comió el personaje, por lo que se permite decir cosas que nadie en su sano juicio diría, y menos aún delante de una cámara de televisión.

Pero la buena de Vivi se cree por encima de cualquier ley que le impongan y ya advirtió que prefiere "irse a vivir al monte" antes que vacunarse.

Pero como su odio es generalizado, le pegó tanto los científicos locales como a los del resto del mundo, a los supermercados, a los bancos y a los gobiernos de todos los signos.