El caso es ejemplo de lo que sucede en la región reconocida por su “cifra negra del abuso sexual”, en palabras el fiscal que investiga esta causa, Sergio Cuello. La vícitima vive con su familia en el Valle de Traslasierra: tiene 11 años y cursa un embarazo de 10 semanas, presuntamente violada por un amigo de su madre de 54 años, que la cuidaba cuando la mamá no estaba.

Concretamente la mujer de Traslasierra llevó a su hija a un centro de salud por dolores abdominales y las pruebas demostraron que tenía un embarazo de 10 semanas.

A pesar de que la Constitución nacinal prevé la aplicación de un protocolo de aborto legal en el caso de violación, la justicia de la provincia de Córdoba bloqueó la aplicación en los hospitales provinciales por el amparo de una ONG católica -El Portal de Belén- en 2013.

La menor tendrá que dirigirse hasta la Maternidad Nacional de la ciudad de Córdoba, a unos 180 kilómetros, mientras que su madre ya autorizó la práctica del aborto legal y la conservación el embrión para un análisis de ADN.

Según reprodujo Cosecha Roja, en Cámara Gesell la nena reconoció a su abusador, por lo que Cuello ordenó la detención del hombre de 54 años. La nena, sus dos hermanos y la mamá quedaron bajo la protección de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la provincia.