El juez federal subrogante Álvaro Coleffi llamó a Vicente Massot, director del diario La Nueva Provincia, a prestar declaración indagatoria el próximo 24 de abril a las 8:15 de la mañana en los tribunales de Bahía Blanca por los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura: la instigación y encubrimiento de los asesinatos de dos trabajadores gráficos de su periódico, Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola, y la complicidad en el secuestro, tormentos y homicidio de otras 35 personas.

Los dos trabajadores antes mencionados fueron secuestrados el 30 de junio de 1976. Sus cuerpos, con numerosos disparos, aparecieron cuatro días más tarde, en la Cueva de los Leones, sobre la ruta nacional 33, a 17 kilómetros de Bahía Blanca.

El argumento de los fiscales José Nebbia y Miguel Ángel Pallazani se basa en la afirmación de que desde sus medios el empresario periodístico realizó aportes esenciales para encubrir y favorecer la represión.

Teniendo en cuenta "la naturaleza de los delitos que se investigan", Massot no podrá salir del país. Coleffi rechazó la solicitud de detención que plantearon los procuradores, ya que, según aclaró,  el imputado "no decidirá darse a la fuga, o que, de conservar su libertad, su accionar no entorpecerá el éxito de la investigación".

La decisión del se basa principalmente en cuatro puntos centrales: la voluntad de Massot de presentarse espontáneamente ante la justicia el 18 de marzo pasado; el "conocimiento público que deriva de su persona"; el arraigo y "permanencia (de Massot) en el país extendida en el tiempo"; y su radicación en un domicilio donde se lo pudo notificar personalmente.

El procurador José Nebbia manifestó que el llamado a indagatoria "se trata de un paso más en este largo camino de búsqueda de justicia". "Vicente Massot fue parte del núcleo de decisión del multimedio, que tuvo un rol determinante en el plan de exterminio", indicó Nebbia.

"Nosotros realizamos un muestreo de casos donde el medio presentaba como enfrentamientos los asesinatos de personas que estaban secuestradas en Centros Clandestinos de Detención de Bahía Blanca, tanto de la Armada como del Ejército. Esas personas habían sido secuestradas, torturadas y sus ejecuciones se fraguaban", añadió.

"Felizmente se está comenzando a transitar el final de la impunidad de la que gozaron sectores civiles fuertemente comprometidos con la dictadura militar. Además de su rol en la desaparición de los dos obreros gráficos, La Nueva Provincia fue un apéndice del aparto represivo del V Cuerpo del Ejército a partir de 1975. Para todos los militantes y operadores del derecho la citación de Massot es una excelente noticia", manifestó a este diario Walter Larrea, abogado de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Bahía Blanca.