Esto ocurrió en la Linea 34 en dirección a Liniers, con este hombre al cual las mujeres denuncian porque siempre las manosea.

El sospechoso intentó bajarse del interno, pero el colectivero le cerró las puertas, mientras las mujeres le gritaban.

Pero, al verse acorralado, el hombre tiró gas pimienta adentro del colectivo, sin importarle la gente mayor, o si había chicos.

Ahí el chofer no tuvo más remedio que abrir las puertas, aunque el acosador no se salvó de las trompadas de los que viajaban en el colectivo.