Robert "Bobby" Tufts, un nene de 4 años, todavía no empezó el colegio pero ya fue elegido dos veces "alcalde" del pueblo de Dorset, una aldea cuya población no llega a las treinta personas y que carece de municipalidad.


Las "elecciones" de esta aldea, que se convoca anualmente, tiene carácter festivo y simbólico. El nombre del ganador se toma de sombrero que se llena con papeles donde figuran los nombres de los candidatos.


Según la madre del "Bobby", la agenda de su hijo incluye recaudar fondos para una fundación infantil y crear una nueva señal de bienvenida para Dorset.


Robert dice que le gusta pasear por el pueblo, hablar con los vecinos, cantar, bailar y, además, ir de pesca con sus padres. En invierno, su familia quiere organizar una búsqueda del tesoro para recaudar dinero para proyectos de caridad.


El niño tenía solo 3 años cuando ganó las elecciones el año pasado. Ahora, a partir de otoño tendrá que combinar las "obligaciones" propias del cargo con la educación, ya que empezará a ir a la escuela.